Ingredientes (3 raciones)
200 gr. de mejillones
200 gr. de almejas o chirlas
200 gr. de gambas congeladas crudas
4 tazas de agua
1/2 taza de arroz redondo
1 Huevo duro
1 pellizco de azafrán
1/4 de cebolla
1/2 puerro
1 diente de ajo
1 vaso de vino blanco
2 cucharadas de tomate triturado
½ zanahoria
Receta
Ahora se pueden encontrar los mejillones ya cocidos con su jugo y evitamos tener que cocerlos, conforme se indica en el paso 3. También encontraremos almejas o chirlas congeladas pero el sabor que aportan es muy inferior. Para una sopa nos podemos ahorrar comprar las gambas frescas pero si son congeladas deben ser crudas y enteras, sin cocer. Necesitaremos las cabezas de las gambas para dar todo el sabor al plato.
Poner las chirlas o almejas en agua fría con algo de sal durante 1/2 hora. Las que estén abiertas hay que tirarlas. Lavar en abundante agua fría. En una sartén poner medio vaso de agua y las chirlas o almejas. Poner a fuego fuerte y tapar. Retirar en cuanto estén abiertas. Si hay alguna cerrada la desechamos. Colar con un cedazo de tela y reservar el caldo.
Los mejillones frescos que estén abiertos o tengan la concha rota hay que desecharlos. Poner los mejillones en una sartén amplia, de forma que no estén unos encima de otros, con medio vaso de vino blanco. Tapar y poner a fuego fuerte. Retirar en cuanto comienzan a abrirse. Retirar los que no se han abierto, colar el caldo con un cedazo de tela y reservar. Quitar las conchas de los mejillones y reservar.
Pelar las gambas y reservar. Las cabezas se hierben en una cazuela con dos vasos de agua durante 7 minutos. Quitar la espuma. Aplastar las cabezas con una cuchara y colar el caldo y reservar.
Hacer un sofrito con ¼ de cebolla, ½ zanahoria, un diente de ajo, medio puerro y dos cucharadas de tomate triturado. Añadir algo de sal y unas hebras de azafrán y un poco de colorante alimentario. Cuando esté bien pochado triturar y pasar por un chino para hacer el caldo más ligero. Incorporar el caldo de cocer los mejillones, chirlas y cabezas de las gambas. En total deberemos poner unos 4 vasos de caldo que completaremos con agua. Añadir media taza de arroz redondo. Cuando el arroz esté casi hecho incorporamos los moluscos y las gambas peladas y damos un hervor.
Se sirven las raciones en cada plato cuidando de repartir los moluscos y gambas y se espolvorea algo de huevo duro picado. Al gusto se puede añadir perejil picado para adornar y dar sabor al plato.
Consumir recién hecho. En caso contrario el arroz comienza a absorber líquido y quedará pastoso. Alternativamente se puede hacer el arroz blanco por separado y agregar, en cada plato, sólo cuando se vaya a consumir.