Sin lugar a duda el mejor caldo de fideos es el que se elabora con el caldo del cocido madrileño. Como alternativa se puede utilizar los que venden envasados, mucho mejores que las pastillas pero, igualmente puede ser casero preparado con gallina y verduras. El caldo de pollo es uno de los fondos que más se utiliza en cocina.

Poner el caldo de pollo en una olla y añadir un pequeño chorrito de agua. Sólo lo que se evaporará durante la cocción de los fideos que es poco tiempo. De esta forma conseguiremos que nuestro caldo no quede excesivamente concentrado al hervir para cocer los fideos.

Añadir los fideos cuando el caldo comienza a hervir y una cucharadita de aceite de oliva extra virgen crudo. Mirar las indicaciones del fabricante respecto al tiempo requerido para cocer la pasta. En España se suele preferir la pasta más cocida y no al dente como en Italia.

Se puede añadir media cucharadita de perejil picado para adornar y algo de pimienta molida. Es optativo.

El caldo de pollo con fideos, que de hecho es el primer plato del cocido madrileño, se sirve junto con unas tiras de cebolla fresca y guindillas vascas o piparras  Entre cucharada y cucharada los comensales dan pequeños bocados a la cebolla o guindilla y mezclan en la boca con la sopa de fideos. El resultado es un contraste especial.