Ingredientes (1 taza)
¾ taza de nata liquida
45 gr. de queso roquefort
2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
1 punta de cuchillo de nuez moscada
Receta
En una sartén, a fuego muy lento, ponemos dos cucharadas de aceite de oliva extra virgen y el queso roquefort desmigado.
Cuando el queso esté deshecho añadimos ¾ de taza de nata liquida para cocinar y añadimos la punta de un cuchillo de nuez moscada.
Dejar que cueca lentamente hasta que tenga la densidad deseada.
Se puede utilizar directamente con una variedad de crudités o bien poner un par de cucharaditas en la parte del tronco de las hojas de una endivia. Igualmente se puede utilizar para pasta pero hay que cuidar que no sea excesivamente fuerte.
Si queremos conseguir una especie de paté de queso tendremos que poner en la sartén dos cucharaditas de postre de harina y dejar cocinar para que no esté cruda.
Si queremos hacer más líquida tendremos que añadir más leche o dejar cocinar algo menos de tiempo.